El colibrí era considerado como el protector de los guerreros y mensajero de los dioses. Los aztecas relacionaban el colibrí con Huitzilopochtli, su dios de la guerra. Para los mayas, los colibríes llevaban los buenos pensamientos de otros hombres. Así, si alguien te desea un bien, el colibrí tomará ese deseo y lo llevará hacia ti. La tradición azteca y maya se unen en esta manta a través de la representación del colibrí.
Tejida en tonos tierra suaves inspirados en los colores del desierto mejicano y acabada con flecos blancos es una manta muy acogedora tanto por su color cómo por su tacto agradable y suave. Es la manta ideal para decorar con colores cálidos tu salón o dormitorio y para entrar en calor en invierno.
La manta Colibrí está disponible en cuatro gamas de colores para adaptarse a la decoración de tu casa.
Combínala con otras mantas decorativas para cama colocándolas de manera informal para reforzar el look estilo boho de tu dormitorio.